Se tiende a reducir el apetito y causar la pérdida de peso "automática", sin la necesidad de contar calorías o el control de porciones.
Esto significa que usted puede comer con plenitud, se siente satisfecho y aún así pierde peso.
Para las últimas décadas, las autoridades de salud han recomendado comer una dieta restringida en calorías, baja en grasas.
El problema es que esta dieta no funciona realmente. Incluso cuando las personas se las arreglan para atenerse a ella, no ven muy buenos resultados.
Una alternativa que ha estado disponible desde hace mucho tiempo es la dieta baja en carbohidratos. Esta dieta restringe la ingesta de carbohidratos como azúcares y almidones (pan, pasta, etc) y los reemplaza con proteínas y grasas.
Los estudios muestran que las dietas bajas en carbohidratos reducen el apetito y hacen comer menos calorías y bajar de peso casi sin esfuerzo, siempre y cuando te las arreglas para mantener los carbohidratos bajos.
En los estudios donde se comparan baja en carbohidratos y dietas bajas en grasa, los investigadores tienen que restringir calorías activamente en los grupos de bajos en grasa para hacer los resultados comparables, pero los grupos de bajos en carbohidratos aún suelen ganar.
las Dietas bajas en carbohidratos también tienen beneficios que van mucho más allá de la pérdida de peso. Bajan azúcar en la sangre, la presión arterial y los triglicéridos. Elevan el colesterol (el bueno) y mejoran el patrón de (el colesterol malo).
las Dietas bajas en carbohidratos causan mayor pérdida de peso y mejoran la salud mucho más que la restricción de calorías, Esto es casi un hecho científico.
Conclusión: Hay muchos estudios que muestran que las dietas bajas en carbohidratos son más eficaces y más saludable que la dieta baja en grasa que todavía se recomienda en todo el mundo.
dietas bajas en carbohidratos
